A pesar de la ilusión y ganas, el viento se nos fué de carnaval.
Aguantamos casi cinco horas flotando, y los padres saben lo que es tener a sus hijos esperando tanto tiempo.en un recinto (su optimist) tan reducido. Pero aguantaron y con muchas ganas se intentó un par de salidas cuando algo parecía que subía el viento. En una salida, casi llegamos a la primera baliza en tiempo. Había algo de corriente persistente de marejada en contra que anulaba la poca velocidad que arrancaban a sus optimist. Solo decir que en la salida del segundo grupo algunos tardaron en cruzar la línea de salida cinco minutos.
Veremos que nos depara el día de mañana, y si podemos hacer las tres mangas mínimas necesarias para el ranking.